La Supercopa cambió de dueño. Ayer Olimpia festejó su retorno a la cancha de los progreseños tras 11 años adjudicándose la corona como el campeón de campeones, tras vencer en penales 4-2 a Honduras Progreso.
Confiados, gracias a las cifras positivas registradas en casa, los pupilos de Wilmer Cruz no mostraron complejos ante los olimpistas, y desde los primeros minutos llevaron peligro a la meta del novel Edry Menjívar.
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